jueves, 30 de julio de 2015

Atlas de Islas Remotas

Cuando era estudiante en la Universidad, mi materia de Geografía Política sonaba aburrida pero "papita", es decir, sencilla de acreditar.

Cuando conocí a mi profesora, pensé que era sencilla la materia, pues el programa de estudios no significa un gran esfuerzo.

Pero, la cartografía no es lo mío, y mi profesora me lo demostró al pedirme hiciera una exposición sobre un tema de islas y mi exposición, demasiado técnica y fría no fue de su agrado, El divorcio entre la geografía, cartografía y yo fue tan rápido que no tuve tiempo de razonar y acepté una parca calificación de "suficiente" con tal de ya no saber nada mas del tema. Calificación que la postre significó una baja en mi promedio. Lo más cercano a estas ciencias era consultar direcciones en google maps.

Sé leer un mapa, sus simbologías y detalles. No soy niña scout, así que con facilidad me perdería en un bosque, ya que carezco de sentido de la ubicación;no sabría distinguir entre el norte y el sur y nunca he tenido que usar una brújula.

En estas estaba hasta que por azares del destino llego amis manos una joya de la geografía, una excelente y espeluznante obra, que si hubiera llegado a mis manos en mi época de estudiante seguro hubiera tenido un MB y hubiera sido la favorita de la profe. Sí, porque la geografía no es plana no es solo leer números y un montón de nombres que nos suenan raros, lejanos y sobre todo ajenos. Es como ¡las matemáticas! hermosa y llena de sabiduría, solo que nos la presentan aburrida, complicada y lo peor: obligatoria. 

Un libro nos invita a aventurarnos a lugares lejanos,  mágicos, románticos y aventureros. Casi siempre dentro dela ficción. Pero, cuando uno se topa con una lectura que nos da los ingredientes anteriores y que son en este mismo planeta, y que lo romántico, aventurero y mágico son datos históricos, no se escapa uno de la admiración, de la sonrisa, de la ensoñación.

Este Atlas fue mi Cook, mi Endeavour; mi Magallanes y su trágica historia al cruzar del Atlántico al Pacífico, el solo pensar en sus aventuras me pone chinita la piel. 

Amplió mi mundo, las islas Clipperton solo la ubicaba por la clase de Derecho Internacional en cuanto al diferendo de México y Francia, pero no ubicaba el hecho de que esta isla alberga una historia macabra de un rey del Faro, violaciones y asesinatos. 

Siempre he admirado a mujeres luchonas y Amelia Earhart es muy querida por mi, al leer sobre su desaparición en el Pacífico, no pude evitar u suspiro y dejas escapar una lagrimita.

Quizá la mayoría de las islas que nos presenta este Atlas, son deshabitadas, pero no por ello dejan de tener su historia, su por qué, su razón de estar en donde están. El hombre siempre le dará un uso, ya sea estratégico militar o comercial o simplemente para ampliar su territorio. El hombre es también su destructor en mucho de los casos de la vida silvestre, de los bosques, ha sido el "culpable" de que  algunas islas sean consideradas como malditas o fantasmales.

Excelente libro, 

SCHALANSKY, Judith. "Atlas de Islas Remotas. Cincuenta islas en la que nunca estuve y a las que nunca iré", Crítica, 2015.


Aún quedan lugares desconocidos en la tierra. Visualmente deslumbrante y con un diseño único, este libro recopila cincuenta islas alejadas en todos los sentidos: de tierra firme, de la gente, los aeropuertos y los folletos turísticos. Su autora utilizó acontecimientos históricos e informes científicos como punto de partida para cada isla. Ellos proporcionan información sobre qué distancia la separa del continente, si está habitada, sus características y las historias que han configurado su acervo local. Con sus impresionantes mapas a todo color y su aire de misteriosa aventura, Atlas de islas remotas es perfecto para el viajero romántico que hay en todos nosotros.